Cómo prevenir riesgos y mejorar su bienestar
El verano es una época especialmente delicada para la salud de las personas mayores. Las altas temperaturas, los cambios de rutina y la exposición al sol pueden agravar problemas de salud existentes o generar nuevos riesgos. En este artículo, te explicamos los principales problemas de salud que afectan a las personas mayores en verano y te damos consejos prácticos y actividades recomendadas para disfrutar de esta estación con seguridad y bienestar.
Problemas de salud más comunes en verano en personas mayores
- Deshidratación y golpes de calor
Las personas mayores tienen menor sensación de sed y una capacidad reducida para regular la temperatura corporal, lo que las hace más vulnerables a la deshidratación y los golpes de calor.
- Problemas cardiovasculares
El calor puede provocar vasodilatación y aumentar el riesgo de bajadas de tensión, mareos o síncopes, especialmente en personas con enfermedades del corazón.
- 3. Infecciones urinarias
La reducción del consumo de agua y la sudoración excesiva pueden favorecer infecciones urinarias, especialmente en mujeres mayores.
- 4. Aumento de enfermedades respiratorias
En algunas zonas, el aire acondicionado y la exposición prolongada a ambientes fríos y secos pueden afectar las vías respiratorias.
- 5. Problemas dermatológicos
La piel envejecida es más sensible a las radiaciones solares, lo que aumenta el riesgo de quemaduras, manchas o incluso lesiones precancerosas.
Consejos para cuidar la salud de las personas mayores en verano
- Hidratación constante
Ofrecer agua frecuentemente, incluso si no tienen sed. También pueden tomarse infusiones frías, caldos suaves, frutas con alto contenido en agua (como sandía o melón) o gelatinas.
- Alimentación ligera y equilibrada
Optar por comidas frescas, de fácil digestión, ricas en frutas, verduras, cereales y proteínas de buena calidad. Evitar comidas copiosas o muy saladas.
- Evitar salir en las horas centrales del día
Entre las 12:00 y las 18:00 h es mejor permanecer en casa o en espacios climatizados. Las salidas deben planificarse temprano por la mañana o al atardecer.
- Ropa adecuada y protección solar
Ropa ligera, transpirable, de colores claros, sombreros, gafas de sol y protector solar (FPS 50) deben formar parte del día a día.
- Vigilancia del estado de salud
Controlar signos de fatiga, mareos o confusión. También es aconsejable mantener al día la medicación y las revisiones médicas.
Actividades recomendadas para personas mayores en verano
- Ejercicio suave y adaptado
Caminar en las primeras horas del día, hacer ejercicios en casa con ventilación adecuada o practicar yoga suave son opciones seguras y beneficiosas.
- Juegos y estimulación cognitiva
Juegos de mesa, lectura, manualidades o entrenamiento cognitivo digital ayudan a mantener la mente activa durante los días de más calor.
- Participación en talleres o actividades grupales
Los centros de día o espacios comunitarios suelen ofrecer talleres adaptados en verano. Fomentan la socialización y evitan el aislamiento.
- Paseos al atardecer o visitas a entornos naturales
Salir a última hora de la tarde a espacios naturales o zonas sombreadas ayuda a relajarse y mantener una conexión con el entorno sin riesgo de insolación.
El acompañamiento profesional, clave en verano
Contar con el apoyo de profesionales del cuidado sociosanitario durante los meses de verano aporta seguridad, tranquilidad y calidad de vida. En Adiper, acompañamos a las personas mayores con planes personalizados de atención adaptados al clima, sus rutinas y necesidades específicas.
La salud de las personas mayores en verano requiere atención especial, prevención y cuidados adaptados. Con unas pautas sencillas y actividades adecuadas, es posible disfrutar del verano con calidad de vida. Desde Adiper, te ayudamos a hacerlo posible. Llámanos y te explicamos cómo